¿Qué es el turismo adaptado?
Cuando hablamos de turismo adaptado nos referimos a que «cualquier producto turístico debería diseñarse de modo que se tuviera en cuenta a todas las personas, independientemente de su edad, sexo o condición, y sin que conllevara costos adicionales para los clientes con discapacidad y necesidades de acceso específicas». Este mensaje del Comité Mundial de Ética del Turismo destaca que no se trata de tener un hotel u atracción turística accesible, sino que deben tenerse en cuenta todos los factores que rodean la experiencia del viaje en su conjunto.
La importancia de un turismo adaptado para todos
El turismo adaptado puede aportar mútiples ventajas y factores diferenciales. En el caso de las ventajas, aunque pueden ser múltiples, podrían destacarse estas cinco:- Integración social para las personas con diversidad funcional.
- Segmentación de población a la que dirigirse, en este caso personas en situación de discapacidad, ya sea por razones de enfermedad o de edad.
- Desestacionalización, es decir, que sus calendarios de viaje suelen ser distintos al de los demás viajeros.
- Aumento del negocio por el factor multiclientelar, es decir, porque las personas en situación de discapacidad suelen ir acompañadas de una o más personas.
- Aumento de la calidad de la oferta turística y de la imagen del sector y de la empresa.
Pero, ¿de qué se trata la accesibilidad y por qué es tan importante?
Como especifica el Observatorio de la Accesibilidad de la Confederación Española de Personas con Discapacidad Física y Orgánica (COCEMFE), la accesibilidad es «la cualidad de fácil acceso para que cualquier persona, incluso aquellas que tengan limitaciones en la movilidad, en la comunicación o el entendimiento, pueda llegar a un lugar, objeto o servicio». Hay muchos tipos de accesibilidad, pero en general podemos destacar:
- Accesibilidad arquitectónica
- Accesibilidad urbanística
- Accesibilidad en el transporte
- Accesibilidad en la comunicación
- Accesibilidad electrónica
Aunque durante muchos años se creía que la mejora de la accesibilidad sólo se refería a la mejora del acceso a los entornos físicos (barreras arquitectónicas y urbanísticas), hoy podemos hablar sin tapujos de la accesibilidad universal. Según afirma COCEMFE, se trata de «aquella condición que deben cumplir los entornos, procesos, bienes, productos y servicios, así como los objetos o instrumentos, herramientas y dispositivos, para ser comprensibles, utilizables y practicables por todas las personas en condiciones de seguridad, comodidad y de la forma más autónoma y natural posible».
Es decir, que ha adoptado una dimensión preventiva y amplia, generalizable a todo tipo de espacios, productos y servicios que además buscan cumplir el principio de igualdad de oportunidades para todos las personas. Para muchas de las organizaciones que defienden los derechos y oportunidades de las personas con necesidades especiales, «la accesibilidad es fundamental para un 10% de la población, para un 40% es necesario y para el 100% es confortable».
La accesibilidad, un tema que nos concierne a todos
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), más de mil millones de personas viven en todo el mundo con algún tipo de discapacidad, lo que supone alrededor del 15% de la población mundial. Además, se espera que para el año 2050, el número de personas con más de 60 años alcance el 20% de la población mundial. Este hecho pone de manifiesto la necesidad de que la accesibilidad sea un tema de presente y de futuro en nuestras vidas.
En nuestro país residen casi tres millones de personas con discapacidad, según el Informe sobre la Base Estatal de Datos de Personas con Valoración del Grado de Discapacidad del IMSERSO. Este dato aumenta si se tienen en cuenta a aquellas personas con problemas de movilidad.
Las personas con necesidades especiales gastan más en viajes en España
Los datos del Observatorio de Accesibilidad del Turismo en España, elaborado por la Fundación ONCE, muestran que las personas que sufren algún tipo de discapacidad gastan de media casi un 30% más en viajar que los turistas sin necesidades especiales. En este sentido, los propios turistas con necesidades especiales creen que «acceder a alojamientos y servicios accesibles implica realizar un mayor desembolso económico».
El informe también destaca que las personas con necesidades especiales viajan con cierta asiduidad. De hecho, el 72% viajan como mínimo dos veces al año. El destino elegido se encuentra para el 60% en el ámbito nacional y un 36% también elige un viaje internacional. Los criterios más importantes a la hora elegir un destino son: el trato recibido, la información disponible sobre la accesibilidad del destino y la movilidad dentro de las instalaciones y establecimientos.
Respecto al perfil de los turistas con necesidades especiales, el Observatorio recoge que un 75% tiene discapacidad (36% física, 18% visual, 12% auditiva), un 19% presenta necesidades especiales o circunstancias temporales, y un 8% tiene 80 años o más. Otros datos para tener en cuenta son que el 60% de los viajeros son mujeres, con una edad media de 45 años y con una formación de grado universitario. Más del 60% trabaja por cuenta ajena.
Fuente: Súper Cuidadores.